En México, hasta el año 2015, no se contaba con una ley que regulara el comportamiento de los medios de comunicación y proporcionara a los ciudadanos un instrumento de defensa para combatir los excesos de éstos en sus publicaciones y difusión de noticias falsas o inexactas que afectaran su esfera jurídica.
Resulta imprescindible y urgente revisar el marco jurídico del derecho de réplica en nuestro sistema constitucional y procedimental, así como la conducta de los operadores jurídicos, órganos jurisdiccionales e instrumentos normativos que lo delimiten, para activar el pleno ejercicio de tal derecho que por tanto tiempo fue ignorado.
Señala el maestro Ernesto Villanueva en su obra que: “A los medios de comunicación se les ha caracterizado como ‘el cuarto poder’, al igual que a los otros tres poderes reconocidos formalmente en nuestro ordenamiento constitucional, por ello, deben someterse a un orden jurídico cuya observancia resulta ineludible para una sociedad regida por un verdadero Estado de Derecho”.